Libres, deciden adónde volar y qué pintar. Como las aves, no tienen ego, no idolatran, no se preocupan por el dinero, el poder ni por conceptos triviales. Creo que nuestro arte podría ir más allá de la ventana y volar a descubrir qué hay más allá de ese horizonte. ¡Pinceles libres! Dejémoslos salir de sus jaulas—si es que aún están dentro—dejémoslos despegarse.
— texto y artes criados por Rodrigo Troitiño Salvator (Troito) — Málaga — 2021.